Adaptar un cómic siempre puede resultar más complicado que versionar una novela, ya que la narrativa en viñetas sería lo más cercado al cine como concepto audiovisual, y el criterio de la ilustración puede llegar a condicionar el lenguaje visual del cineasta. En Watchmen', por ejemplo, Zack Snyder parecía que hubiera utilizado el cómic original de Dave Gibbons y Alan Moore como story board'.